Acabo de terminar otro libro de relatos cortos. Intento mandárselo a mi editora: la Lore, por correo electrónico, pero fracaso. No me deja “Copiar y Pegar”.
Estoy a punto de sumergirme en el demencial mundo de la informática. Para ver si lo consigo enviar. Pero acabo por asumir que no tengo ni puta idea.
Esperaré, pues, a Cris, quien me sacará de este infierno. Y todo por cincuenta euros al mes, que siempre me olvido de entregárselos. Y ella no me recuerda.
leopoldo
Añadir comentario
Comentarios