Estábamos a principios de mes con un saldo de 200 euros en cuenta. Pero la situación se ha resuelto. ¿Cómo?
Pues bien, Hicham había comprado un coche de segunda mano que resultó un desastre, pues se averiaba constantemente y hubo que pagar innumerables reparaciones. Pero ha logrado vendérselo a un amigo por mil doscientos euros y un teléfono móvil —que valoraron en cincuenta euros y que previsiblemente Hicham venderá por cien. El siguiente paso será guardar ese ingreso y seguir ahorrando hasta conseguir el precio de un coche nuevo que posiblemente adquirirá en Alemania, donde son mucho más baratos. Iría a buscarlo a tierras germánicas con un amigo.
Gracias a los mil euros por la venta del cascajo, he tenido el honor de recibir diez euros para el desayuno y tabaco de liar, para mañana.
Los mil euros también serán para las cenas.
En fin, un niño bien de buena que soy se ve sumergido en tretas semifraudulentas para llegar a fin de mes.
Yo lo que no acabo de ver claro es lo del viaje a Alemania, que dislocará sin duda los cálculos económicos.
leopoldo
Añadir comentario
Comentarios