Enriquito Llora

La novia de Enriquito se llama María Victoria y bailando sevillanas se torció un tobillo. Quedó coja y de mala hostia.

Ella es muy andarina y tuvo que quedarse en casa inmovilizada. Aunque siempre encontraba ánimos para pasear a su perrito Chenco. Y hablar con los dueños de otros perros.

Enriquito, que también es muy andarín, se quedó sin su pareja de caminatas. Pero sobre todo muy triste por tener paralizada a su amor. Entonces le dio por estudiar y por beber wiski.

Todo su dolor era por la pobre Vicky, pero él, para disimular, decía que era por la catastrófica situación internacional: Guerra de Gaza y de Sudán, así como la invasión rusa de Ucrania. Excusas no le faltaban para tanto dolor.

Pero Vicky mejoró repentinamente y finalmente se curó.

Fueron a Águilas y a ver a la madre de Victoria. Y su vida retornó a la normalidad. “Enriquito, a ver cuándo paras de pensar obsesivamente”, le decía María Victoria, reventada de haberse casado con un intelectual.

“Yo estoy mucho peor que Vicky”, decía Enriquito cuando los dolores de tobillo de la Victoria se hacían insufribles.

Pero, tal como decíamos, la Victoria se curó y todo volvió a ser maravilloso en sus vidas. Amayita, la hija juez de ambos, superó su depresión y volvió a trabajar como una mula.

leopoldo, primo de Enriquito, le propuso a la Vitoria tener relaciones sexuales. Y Enriquito le cortó los huevos. “Es que la quiero tanto”, arguyó el menor de los Panero.

leopoldo